jueves, 11 de diciembre de 2008
A veces sucede...
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A veces sucede...
que se entrega el alma
y espinas se obtienen,
que se ofrece el pecho
y el centro se hiere,
que se brinda todo...
y bebemos la hiel.
A veces sucede...
que el amor no basta
porque sólo uno lo siente,
que la vida es triste
porque ya nada divierte,
que no hay fantasías
en las cuales creer.
A veces sucede...
y en esos momentos pesa todo tanto
que nada conforma, ni siquiera el daño
de quien no nos jura la misma pasión.
Y nada interesa...
ni la simple fuerza que impulsa el día a día,
ni el canto del ave brindando alegría
ni el vital sentido de la sinrazón.
A veces sucede...
A veces.
Liliana Varela
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1 comentario:
María, por fin te encuentro donde creo que estarás el día a día.
Pareciera que lo hubieras escrito luego de que converáramos, parece hecho para mí, para describir mi largo caminar por el mundo del amor, casi siempre por una sola vereda.
Te encontré María, por fin. Te dejo un saludo navideño en mi blog, por favor, léelo. Mi abrazo fuerte.
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